RECETA PARA EL MEJOR GOFRE BELGA

Uno de mis desayunos y meriendas favoritos son los gofres, conocidos también como waffle, Wafol o wafle (oblea), derivan de la misma palabra del alemán antiguo Wafel, que se relaciona con palabras que significan “tejido” y “panal de abeja”.

Me encantan los gofres y hasta tienen su día, el 25 de marzo, tengo que recomendaros que si podéis os hagáis con una gofrera. Es una gozada poder disfrutar de un delicioso gofre, nada que ver con los comprados en el súper, y si su sabor es delicioso si lo hacéis en casa disfrutareis también del maravilloso aroma que inunda toda la casa. Mi gofrera es este modelo:

y aunque le tengo mucha estima y ya llevo muuuuchos años con ella, llegado el momento de adquirir una nueva me encantaría este modelo 3 en 1 que es la mejor gofrera cecotec porque tiene 3 placas intercambiables para gofres, berlinas y muffins.

Este modelo es ideal para temporadas el verano, cuando encender el horno para hacer cualquier antojo está descartado, por el gran calor que desprende el horno, y que resulta insoportable y con la gofrera es mucho más fácil y sin tantísimo calor.

Los gofres que se han hecho populares y que se consumen mayoritariamente por todo el mundo vienen de Estados Unidos y fueron llevados a Europa con los emigrantes americanos.
Fue durante la exposición universal de 1960, en Bruselas, el belga Maurice Vermersch tuvo la idea de acompañarlos de nata, chocolate y otros dulces, con lo que tuvo mucho éxito. Luego se trasladó a Estados unidos, los bautizo con el nombre de “gofre belga”, y así nos han llegado hasta la actualidad.

Os dejo mi receta favorita de Gofres Belgas y para los que aun no tengáis una gofrera las mejores gofreras las he visto en esta página por si os interesa.

Ingredientes:

• 500 gr. de harina de fuerza,
• 175 gr. de leche tibia,(yo necesité un poco más)
• 50 gr. de levadura fresca de panadero,
• 2 huevos y 1 yema,
• 10 gr. de sal,
• 1 sobre de azúcar avainillado,
• 250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente,
• 300 gr. de azúcar perlado(si no tienes azúcar normal)
Acompañamiento de los gofres: nata, chocolate, caramelo, mermelada…

Preparación:

Desleír la levadura fresca en la leche tibia, formamos un volcán con la harina, la sal y el azúcar avainillado y en su interior echaremos la leche con levadura y las yemas. Mezclaremos hasta conseguir una masa uniforme, donde todos los ingredientes se hayan unido perfectamente, quedando una masa bastante tierna o blanda.
Se deja reposar la masa resultante, cubierta con un plástico film (engrasado con un poco de aceite para que no se pegue), después se cubre con un paño de cocina y se deja reposar por 30 minutos aproximadamente, hasta que haya doblado el volumen.
El tiempo de reposo es relativo, pero para ayudar a que leve bien, sobre todo en invierno conviene meter la fuente donde hemos puesto la masa en el horno previamente calentado unos 5 minutos para que cogiera algo de calor y le ayudara a levar.
Una vez doblado el volumen, se desgasifica la masa y se le añade la mantequilla cortada en cuadraditos, se amasa para que se integre toda la grasa en la masa, finalmente se añade el azúcar perlado(yo azúcar normal ó como dice Marisa, podemos poner terrones de azúcar machacados) y las claras de huevo a punto de nieve y se mezcla delicadamente hasta que se integre todo en la masa.

Preparamos la gofrera para cocerlos. Para ello, pincelamos toda la superficie de la gofrera con aceite de girasol. Cerramos el aparato, y  esperamos hasta que la gofrera haya alcanzado la temperatura idónea.
Nos ayudamos de unas cucharas soperas para separar trozos de masa, las echamos en las cavidades de la gofrera y las aplastamos un poco para que se extiendan más o menos por toda la superficie. (No es necesario hacerlo muy concienzudamente ya que luego al cerrar la tapa, se distribuye la masa uniformemente).
Cerramos la tapa y la dejamos unos minutos, comprobamos que ha cogido un bonito tono dorado y sacamos.

Esta receta de gofres belgas, que es mi receta favorita la podéis ver aquí. El único cambio que he hecho con el paso de los años ha sido que incorporo el huevo separando las yemas y las claras. El truco de montar las claras es para que queden crujientes, pero de cualquiera de las dos maneras os resultarán deliciosos. Probadlo y me contáis.

Muchos besos.